Egozenter muestra la reproducción abstracta de un motor en rotación. La forma figurativa deriva de una correa de transmisión. En la tonalidad más clara de los extremos de la correa del Egozenter Stankowski aplica un principio que ya había utilizado para folletos tipográficos cuando trabajaba de dibujante publicitario y que juega con la encentadura del borde del cuadro. De este modo, el trabajo muestra la estrecha vinculación entre su actividad de pintor y la de diseñador gráfico. En contra de la programática de los “Zürcher Konkrete” (concretos de Zúrich), a los que estuvo estrechamente vinculado antes de la guerra, introduce en su obra la línea diagonal, y también emplea, como en este caso, la curva.